CAPACIDADES
INNOVADORAS Y TENDENCIAS TECNOLÓGICAS EN LOS CURRÍCULOS DE LOS PROGRAMAS DE INGENIERÍA
DE SISTEMAS
INNOVATIVE
CAPABILITIES AND TECHNOLOGICAL TRENDS IN THE CURRICULA OF THE SYSTEMS ENGINEERING
PROGRAMS
Catalina Arias-Duque,
Mónica Eliana Aristizábal Velásquez
1Facultad de Ciencias Administrativas, Económicas y Contables,
Universidad Católica Luis Amigó, Colombia
E-mail: cataarias@hotmail.com,
monica.aristizabalot@amigo.edu.co
(Enviado Abril
13, 2018; Aceptado Mayo 21, 2018)
Resumen
Las capacidades
de innovación, desde la perspectiva de las capacidades humanas de Martha
Nussbaum, se describen desde lo que se es capaz de ser y hacer; hecho que
adquiere relevancia en los currículos, y en especial en los que ataña esta
reflexión que es la formación de futuros ingenieros de sistemas. El profesional de ingeniería de
sistemas, al ser impactado por las constantes transformaciones de las ciencias
de la computación, requiere una estructura curricular que le permita
adelantarse a los acontecimientos y tener claridad de las tendencias
tecnológicas, pero, además, que le permita entender su papel dentro de la
sociedad y en la transformación de la misma. Se plantea que, desde las “capacidades
innovadoras”, se pueda generar un desarrollo integral que vincule no sólo la
obtención de habilidades técnicas y prospectiva de las mismas, sino también
potenciar el desarrollo humano.
Palabras clave: Currículo,
Innovación Tecnológica, Capacidades de Innovación, Ingeniería de Sistemas,
Tendencias Tecnológicas.
Abstract
The innovation
capabilities from Martha Nussbaum human capabilities perspective, are described
from what one is capable of being and doing; a fact that acquires relevance
into curricula, and especially in those that concern this reflection what is the formation of future systems
engineers. The system engineer professional, being impacted from the constant
computation science transformation, not only requires curricular structure that
let him get ahead of the events and be clear about technological trends, but
also allow him to understand his role into society and its transformation. It
is proposed that, from the "innovation capabilities", an integral
development can be generated, that links not only the obtention of technical
abilities and its perspectives but also the enhancing of human
development.
Keywords:
Curricula, Technological Innovation, Innovation Capabilities,
System Engineering, Technological Trends.
La ingeniería presenta sus inicios desde finales de
la edad media, ganando protagonismo en la revolución industrial en los siglos
XVII, XIX y XX con el surgimiento de las primeras máquinas; es evidente su
aporte a las sociedades, han sido décadas, e incluso siglos, de contribuciones
tecnológicas y avances industriales [1].
En el caso especial de la ingeniería de sistemas, no
se conoce como una de las más antiguas de su área, es relativamente reciente
comparada con otras ingenierías; de acuerdo con los análisis y discusiones del
I Encuentro Nacional de Programas de Ingeniería de Sistemas (REDIS)
realizado en
Colombia en el año 2010, se asocia el inicio de la “Ingeniería de Sistemas” en
los años sesenta con el auge de los computadores; contexto de desarrollo que ha
tomado gran fuerza e importancia a nivel mundial [2].
Lo anterior, podría dar indicios de un hábitat
dispuesto para el crecimiento y auge de la profesión o carrera, pero pese a lo
anterior, para el mercado mundial, actualmente el ingeniero de sistemas viene camuflando
su misión y parece estar delegando funciones y especialidades técnicas a
tecnólogos y técnicos del área, disminuyendo así importancia y desdibujando su
impacto.
Desde esta perspectiva, algunas empresas ya no ven
tan necesaria la participación de ingenieros en el área de sistemas, los
jóvenes se están viendo desmotivados para estudiar la profesión y se está
perdiendo la noción de su función [2].
El objeto sobre el cual se realiza esta reflexión es
el currículo, y en especial el que forma ingenieros de sistemas, por lo cual uno
de los aspectos que se señalan respecto a la formación de estos ingenieros es
que sus currículos no están siendo fortalecidos en “capacidades innovadoras”, siendo
las capacidades las que le permiten a la persona
desarrollar la libertad de tomar las oportunidades desde su capacidad de ser y
hacer [3].
En cuanto a la capacidad de hacer, en la formación
del ingeniero de sistemas como transformador de las ciencias de la computación,
los currículos de esta disciplina deberían estar sujetos a las grandes
tendencias tecnológicas con las que debe alinearse y dar respuesta en forma
prospectiva, no sólo con los requerimientos del hoy, sino los del mañana, los
que se estarán tejiendo para el egresado.
Si los currículos de las instituciones educativas de
un país no se alinean para la formación con el desarrollo y constante adelanto
tecnológico, dicho país correrá el riesgo de ser sólo importador de tecnología,
y no estaría caminando hacia la evolución y competencia que el mundo, con su avance,
requiere.
El enfoque en capacidades desde el ser busca el
desarrollo de las libertades, tal como lo propone Martha Nussbaum. La idea es
que, desde el desarrollo humano, el ingeniero no solo se forme como un
propulsor de la economía de un país, sino que, al pensar en ese país, su
innovación, su desarrollo, también procure soluciones que socialmente ayuden a
la calidad de vida.
Por lo anterior, se genera a continuación una
reflexión que vincula lo curricular con el desarrollo de capacidades de
innovación como elemento para propiciar la innovación tecnológica en los
futuros ingenieros de sistemas en pro del desarrollo social.
Como perspectivas conceptuales para abordar esta abstracción,
se presentan cuatro categorías que permiten dar contexto y fundamento, en el
marco de la ingeniería de sistemas y las ciencias de la computación e ilustrar
la conexión con las capacidades de innovación; así como los aspectos que pueden
asociarse a partir de las tendencias tecnológicas.
2.1 Categoría
1: Ingeniería de sistemas y ciencias de la computación
Relacionando algunas fotografías históricas sobre el
surgimiento de los computadores y los sistemas de información se visualizan
fundamentos desde el siglo XII donde nace el ábaco moderno, luego el siglo
XVIII lo que se conoció como máquina de escribir y la revolución industrial en
el siglo XIX con el telar automatizado, el telégrafo, el teléfono, la radio, entre
otros [4].
La historia del desarrollo computacional fue
desarrollándose poco a poco; lo que se conoció como el principio del computador
moderno: La máquina analítica, fue concebida por Charles Babbage, apoyado por
Ada Lovelace, fue uno de los primeros pasos en el intento por desarrollar
tecnología que coadyuvara al hombre en tareas de análisis o cálculo [4].
Al cabo del tiempo, el gobierno le retiró a Babbage
y a Ada el apoyo financiero, lo que llevó al estancamiento y cese de las
actividades de la máquina analítica. Lo que puede evidenciar como la tecnología
de este siglo (1800s) no estaba lista aún para los computadores y no estuvo
lista hasta 100 años más [4].
Finalmente, En el siglo XX, se consuman los
resultados definitivos para el inicio de las Ciencias de la Computación.
Algunos hitos que hicieron historia se describirán a continuación, aclarando
que no fueron los únicos, pero se citan en este contexto ya que fueron elegidos
para ilustrar el surgimiento del microcomputador en el año 1981; hecho que marcó
un acontecimiento importante pues, a diferencia del alcance de esta tecnología
exclusiva al principio solo para gobiernos y empresas, significaba la posibilidad
de acceder a la tecnología por cada individuo.
La siguiente tabla (Tabla 1), presenta algunos de
estos hitos.
Tabla
1 Algunos
hitos de la historia de los computadores .
Año |
Acontecimiento |
1939 |
ü Atanasoff
crea el primer computador digital ü Zuse
termina el primer computador programable de propósito general |
1943 |
ü Computador
Colossus de Turing descifra códigos de Nazis |
1944 |
ü El
profesor Howard Aiken, de Hardware, un millón de dólares aportados por IBM,
completó la Mark I. Medía 15 mts. de largo y dos y medio
de altura. |
1946 |
ü Se
construye el ENIAC, (Electronic
Numerical Integrator and Computer.) Pesaba 30 toneladas y tenía 18000
tubos al vacío. Para la segunda guerra mundial apoyando a Estados Unidos. |
1947 |
ü Shockley
Brittain y Ardeen inventan el transistor. (Reemplaza tubos al vacío). |
1956 |
ü En
Bell Labs se construye el primer computador transistorizado. |
1969 |
ü Primer
microprocesador. |
1972 |
ü Primer
juego de computador casero. |
1974 |
ü Primer
microcomputador |
1976 |
ü Xerox
es el pionero de la interfaz gráfica con el usuario |
1981 |
ü IBM
presenta su primer microcomputador |
Fuente:
Elaboración propia, tomada de Beekman (1998) [4].
La ingeniería de sistemas nace con las ciencias de
la computación, lo que nos indica que no es una de las ingenierías más
antiguas, no obstante, es necesario dar cuenta cómo esta fue cobrando sentido a
medida que surgen los computadores, pues éste incluyendo el software que lo
acompaña, fue desde el principio su objeto de desarrollo y elemento sobre el
que vienen surgiendo los últimos adelantos tecnológicos. La ingeniería de sistemas estudia los
“sistemas”, basándose en el concepto que existe para las ciencias de la
computación, dado que para las diferentes ciencias esta definición tiene un
contexto diferente [5].
La Association for Computing Machinery (ACM)
& IEEE Computer Society, define las ciencias de la computación como objeto
de estudio de la siguiente manera: “La ingeniería informática es una disciplina
que incorpora la ciencia y la tecnología del diseño, la construcción, la
implementación y el mantenimiento de los componentes de software y hardware de
los sistemas informáticos modernos y los equipos controlados por computadora” [6].
Tomando lo anterior, se puede esclarecer que, para
las ciencias de la computación un sistema es un amplio conjunto de componentes
integrados que interactúan mutuamente para alcanzar juntos una función
compleja. Estos sistemas pueden descomponerse en subsistemas más pequeños o ser
parte de otro sistema más grande.
Se explica que, un sistema no es sólo aquel producto
de software que tiene una conversación directa con el usuario, por ejemplo, un
procesador de palabras; un sistema puede ser también el software que administra
y gobierna el hardware y éste a su vez, el hardware
en sí mismo.
2.2 Categoría 2: Tendencias tecnológicas e innovación
Las tendencias tecnológicas se refieren a todas
aquellas evoluciones, de tipo tecnológico, que se han dado y se espera se sigan
dando en el tiempo. Las ciencias de
la computación en las últimas décadas han alcanzado un nivel inimaginable
respecto a los avances tecnológicos y es la ingeniería de sistemas la que
constantemente se encuentra en tensión por estos adelantos y avances.
Para la organización Gartner, que es una de las más importantes
del mundo en cuando a investigación en tecnología, las tendencias tecnológicas
para el 2018 las clasifican en 3 grandes bloques: Intelligent (Inteligencia); Digital (Digital) y Mesh (Combinación) [7].
La Inteligencia, tecnología con una cierta
autonomía, es la que tiene componentes de presunta inteligencia que no depende
del humano; ésta se divide a su vez en: AI
foundations – Fundamentos de Inteligencia
Artificial, Intelligent Apps and Analytics – Aplicaciones inteligentes y
analíticos y Mesh – Conexión entre componentes [7].
Digital, significa verter el mundo real en el
mundo virtual en una experiencia digital combinada. Ésta se divide a su vez en:
Digital Twins – Digital combinado con
humano, Cloud to the Edge – Nube al
filo de cómputo, Conversational Platform
– Plataformas conversacionales (chatbots) e Inmersive
Experience – Experiencia de Inmersión [7].
Conexión
entre componentes, se refiere a todo lo que tiene que ver con conexiones,
dinámicas, de personas, de procesos de aplicaciones, de tecnologías y de
dispositivos. Ésta se divide a su vez en: BlockChain – Cadena de
conexión, Event – Driven –
Direccionar eventos y Continuous adaptative
risk and trust – Adaptación continua al riesgo [7].
Es necesario tener claridad que son las tendencias
tecnológicas las que apalancan los ejercicios constantes de innovación, que,
entendida desde el contexto de país, normalmente, se dispara desde la
motivación empresarial o social. Para
este fin, es importante destacar los apoyos que se vienen otorgando en los
últimos años, tanto a nivel empresarial, como de gobierno.
Según estudios de la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económicos OCDE , cuya misión es promover políticas
que mejoren el bienestar económico y social de las personas alrededor del
mundo, se indica que la innovación en el sector empresarial obtiene apoyos
gubernamentales mediante beneficios específicos que lo que intentan es promover
los avances para el desarrollo y crecimiento económico [8].
Las anteriores tendencias y ejercicios de
innovación, entre otros que surgen, marcan la línea a seguir para la ingeniería
de sistemas, lo que permite cuestionarse sobre si los estudiantes de esta
profesión o futuros profesionales, y más aún, si sus currículos, tienen la
claridad suficiente de esta dinámica evolutiva que les permita adelantarse y
proyectarse a las necesidades y requerimientos de este contexto tecnológico que
avanza cada vez con mayor rapidez.
La investigación puede ser una estrategia
sistemática y viable para intentar materializar dichas tendencias y mantenerlas
en el tiempo. Las IES (Instituciones de Educación Superior), son uno de los
terrenos donde estas investigaciones se pueden desarrollar.
2.3 Categoría 3: Capacidades de Innovación
Las capacidades tomadas desde el punto de vista de la
formación, y en especial en el nivel universitario, tienen como fundamento el
desarrollo humano. ¿Qué es, entonces, el desarrollo humano basado en
capacidades para la universidad? Unceta presenta, de acuerdo con el rector de
la Universidad de St. Andrews en Escocia Stuart Mill en su discurso de 1867,
que el objetivo de la universidad no es formar ingenieros o médicos hábiles,
sino seres humanos capaces. Además,
afirma que el objetivo de la universidad es formar estudiantes que pongan en
duda las cosas, que no acepten doctrinas propias o ajenas sin el riguroso escrutinio;
señala que “el análisis del papel del conocimiento en la promoción del
desarrollo humano se encuentra indisolublemente unido a la cuestión de las
capacidades” [9].
Esta noción de capacidades ha sido promovida y
promulgada por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) desde
1989, con base en las propuestas de Amartya Sen y Martha Nussbaum, como
principales exponentes [9].
Unceta, argumenta desde la teoría de capacidades
de Nussbaum, la aplicación a la universidad, desde varias perspectivas: desde las
capacidades internas, que se definen como “las características de una persona
(los rasgos de su personalidad, sus capacidades intelectuales y emocionales, su
estado de salud y de forma física, su aprendizaje interiorizado o sus
habilidades de percepción y movimiento)” y desde las
combinadas, que “son la suma de las mencionadas capacidades internas y aquellas
otras que dependen del entorno político, social y económico” [9].
El concepto de capacidades desde Nussbaum parte
de la libertad, o lo que ella llama “libertades sustanciales” u oportunidades
que se pueden llevar o no a cabo y que están en una estrecha relación con la
consciencia de las desigualdades sociales [3].
A partir de lo anterior, y teniendo como
referente tanto capacidades internas como combinadas en función de “lo que es
capaz de hacer y de ser de cada persona” sin perder de vista las “libertades
sustanciales” [3], esta reflexión toma el concepto de capacidades y lo aplica conjuntamente
con el de innovación para soportar la formación en ingeniería de sistemas, interpretando
“capacidades de innovación” como la conciencia social y humana que conlleva
tener capacidades centrales tales para el desarrollo humano y no solamente como
una suma de ganancias tecnológicas.
El enfoque que se da desde el ejercicio
formativo del ingeniero de sistemas es que estas capacidades, desarrolladas en
el trayecto de las propuestas curriculares, sirven como base para cultivar en
el estudiante y posible ingeniero el discernimiento ante las diferentes
posibilidades que ofrece su campo de acción en algunos temas posiblemente
también sociales; éstos pueden ser relacionados por ejemplo, hacia la contribución
del mejoramiento de la sociedad actual, entendiendo que la formación
“tecno-científica” no se encuentra en dirección contraría a la “formación
humanista”, antes bien esta se pone al servicio “de la liberación permanente,
de la humanización del hombre” [10].
.
En congruencia con lo anterior, el enfoque del
desarrollo humano integral en la universidad ha tomado matices interesantes que
apoyan la postura de la formación desde las capacidades; tal es el caso de Villa
Hincapié ,quien lo orienta desde la perspectiva de la “crisis” en la
universidad partiendo de un argumento que se basa en la falta de profundización
en el desarrollo humano y como ésta se ha preocupado más por sus efectos en la
sociedad, pero desde lo que conviene a la ciencia, a la técnica o al mercado
global y no tanto desde el horizonte de las humanidades[11].
La teoría de Villa Hincapié, propone una desmonopolización de la construcción del
conocimiento en congruencia con el eurocentrismo científico, y propone más la
construcción de conocimiento de una manera más multidisciplinar,
transdisciplinar y ética [11].
Las capacidades innovadoras se expresan en esta
reflexión, como el desarrollo de esas potencialidades tecnológicas para el
desarrollo que vienen cargadas de sentido humano utilizando las capacidades
centrales.
Boni, ha realizado una propuesta para currículos
con base en capital y desarrollo humano para ciudadanos globales, en esta
propone lo que puede ser el símil para las capacidades de innovación que aquí
se enuncian: “la capacidad de imaginar y realizar proyectos orientados al bien
común” [12].
Carpio, refuerza la anterior postura con la
propuesta del enfoque por competencias desde la perspectiva del desarrollo
humano, de donde, basado en elementos teóricos sobre éste, se critica también
el modelo economicista y se enfatiza en el modelo de calidad de vida propuesto
por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Este estudio
enfatiza, como un reto para la universidad del nuevo siglo, destacar el
desarrollo de capacidades y valores para el desarrollo de un proyecto de vida
[13].
Lo interesante de la propuesta de Carpio, es
como visualiza estas capacidades con la innovación, tomándolas desde la
formación del pensamiento crítico, de tal forma que al adquirirlas y
desarrollarlas paralelamente éstas desarrollan tal comportamiento.
Las capacidades superiores permiten no sólo captar la
información sino transformarla generando conocimiento. Nos referimos
específicamente al tipo de pensamiento que se orienta en relación, al
pensamiento global, el pensamiento crítico, el pensamiento innovador, y
aquellas formas de pensamiento que nos permiten tomar decisiones [13].
Muñoz y Calle, apoyan el desarrollo humano como
aspecto que se debe privilegiar en la formación, incluso como base para generar
nuevos conocimientos, es decir, aquellos saberes que el estudiante debe
aprender y que serán afianzados con más destreza con la premisa de un buen
desarrollo humano basado en capacidades [14].
Por lo anterior, y como se podrá observar a lo
largo de esta reflexión, que se vincula el término “capacidades de innovación” con
aspecto fundamental a desarrollar en los currículos para la formación de los
futuros ingenieros sistemas el desarrollo como eje que promueva el hacer
innovador desde la técnica y objeto de estudio, pero cargado de sentido social
que se promueve desde el mismo desarrollo humano.
2.3 Categoría
4: Currículo
Es importante enunciar la valiosa definición y
epistemología del currículo, sin embargo, son tantas las conceptualizaciones,
las perspectivas, las posturas, los modelos, las tradiciones que no se torna
una tarea sencilla tomar uno u otro elemento de cada uno de ellos. Díaz-Barriga
, afirma que el currículo forma parte de los saberes educativos de un gran
debate en el siglo pasado y que el vocablo currículo adquiere una
característica que lo asemeja a otros construidos en la teoría educativa del
siglo XX: evaluación y planificación [15].
No se desconoce que existe una ineludible referencia
para la frontera del currículo y es el hecho de partir de un contexto específico
que le imprime cada país, en el cual, existe una normatividad que circunda las
costumbres sociales, culturales y económicas. Desde esta realidad, se colocan
cimientos conceptuales, pues el escenario educativo sea público o privado,
contiene al menos elementos base convergentes con las regulaciones y el
contexto del país en el cual se da.
Para explicitar el concepto de currículo, en el
contexto colombiano, se parte de la definición desde la normativa; de acuerdo
con la Ley 115 de 1994 en la República de Colombia, la cual es llamada la Ley
General de educación; allí existe una definición para currículo:
Currículo es el conjunto de criterios, planes de
estudio, programas, metodologías, y procesos que contribuyen a la formación
integral y a la construcción de la identidad cultural nacional, regional y
local, incluyendo también los recursos humanos, académicos y físicos para poner
en práctica las políticas y llevar a cabo el proyecto educativo institucional.
(Art.76) [16].
Desde el punto de vista cultural, García Bravo &
Martín Sánchez, cuenta que la educación pública en Colombia, por ejemplo,
empieza a demandar contenidos educativos con enfoques desde lo filosófico,
teórico, político, pedagógico y social cuyo fin es comprender y atender la
diversidad cultural en el sistema educativo.
Esto se hizo muy visible como una propuesta impulsada
entre otros elementos por la diversidad cultural de la Constitución de 1991, que
busca mostrar la perspectiva
cultural y política que la educación pública puede ofrecer y a su vez servir
como instrumento de esa inclusión social esperada [17].
El currículo en las diversas instituciones
educativas tiene contenidos y alternativas disímiles; pero en lo que trata de
buscar convergencia es en las intenciones.
Por ejemplo, posiblemente sean más cómodos ciertos elementos de
tecnología de punta para un laboratorio en un grupo de estudiantes de cierta
institución que en otra, sin embargo, la intencionalidad del objetivo
curricular puede ser la misma.
Con este hecho, la institución que no cuenta con
los recursos podría, por ejemplo, acudir a la consecución en forma subsidiada, o por medio de
intercambio de estudiantes o quizás mediante algunos convenios con sectores
productivos o el mismo sector educativo. En este caso el diseño del currículo
variará en los procedimientos didácticos, pero su resultado puede ser
mayormente similar.
A continuación, se presentan los tipos de
currículos que aportan e impactan de manera explícita en el ejercicio
formativo:
Macro-currículo
Éste se refiere al
nivel macro del currículo, se identifican problemas y temáticas generales que
deberá afrontar el programa. Contiene entre otros la fundamentación, la
contextualización, los propósitos de formación, las competencias generales de
los egresados y las áreas del conocimiento específicas [18].
Meso-currículo
Éste baja un poco
de nivel y describe las áreas temáticas profesionales, las áreas temáticas
básicas, las competencias del egresado soportadas por las áreas temáticas
profesionales, las competencias, la definición de unidades temáticas (cursos,
asignaturas, etc.) con sus contenidos y sus propósitos, hasta llegar al mapa
general de unidades temáticas por niveles o semestres [18].
Micro-currículo
Este nivel es más
detallado, tiene la descripción de las actividades de aprendizaje, para
impartir en los contenidos de las unidades temáticas (asignaturas, cursos)
utilizando estrategias didácticas específicas para cada una [18].
Después de identificar el significado de currículo y
los niveles de currículo según su estructura y detalle, se pasa a describir los
modelos de currículo que se han configurado durante el tiempo. En este sentido,
es notable el esfuerzo realizado para tratar de concretar un concepto que por
años ha sido completamente teorizado y cuestionado, además de las diversas
tradiciones que pueden existir en su evolución. De acuerdo con el análisis epistemológico
realizado por Román y Díez las tradiciones o modelos curriculares más nombrados
son: Academicista, Tecnológico Positivista, Interpretativo y Socio – Crítico.
·
Academicista: Sus raíces están enfocadas en el
trivium y cuatrivium (tres y cuatro vías de para obtener conocimiento). El
trivium comprendía la gramática, la dialéctica y la retórica y el cuatrivium
comprendía la aritmética, la geometría, la astronomía y la música [19].
·
Tecnológico- positivista o conductista: Es el
modelo que inicia con cambios en cuanto a que se observa el currículo con el
enfoque de organización, planeación, evaluación, se trazan objetivos generales
y de aprendizaje. También se apoya en el conductismo mediante estímulo-respuesta.
Como parte del aprendizaje se toma en cuenta las experiencias generadas en el
ámbito de la escuela [19].
·
Interpretativo-Cultural: Es un modelo más
existencialista, la enseñanza desarrolla valores y capacidades, el profesor
tiene un papel importante en el desarrollo del aprendizaje. Se centra en valores como parte de una
sociedad. Defiende flexibilidad curricular, impulsa métodos eclécticos ó
prácticos. Posee tres corrientes:
reconceptualista, práctica y cognitiva [19].
·
Socio – Crítico: El currículo se conecta con la
sociedad, este modelo deja al positivismo como parte del sistema, pero no como
el principal enfoque. Se promueve
la crítica desde el aula argumentando la razón, la libertad y la autonomía.
Este modelo termina de reforzar y determinar la práctica como llave fundamental
de acompañamiento de la teoría. Modelo setentero y considerado moderno y –
postmoderno [19].
Se puede deducir que currículo es todo lo que compone
la escuela, su desarrollo en las clases y fuera de ellas, con el objetivo de
desarrollar los contenidos educativos de tal manera que puedan ser
evaluados. En esta intención, se
logran objetivos planeados y no planeados, para estos últimos, el resultado
puede o no ser evaluado pues, cuando un estudiante desarrolla habilidades o
aprende algo que no fue planeado, posiblemente sea imperceptible para el
docente o para la institución misma, no obstante, impactan y se encuentran
presentes en el ejercicio formativo de cada individuo.
Todo lo anterior permite contextualizar la temática
sobre la cual se desarrolló la argumentación que presenta a continuación; se
incluyen tres conclusiones que involucran la importancia de la definición y
desarrollo de las capacidades de innovación y tendencias tecnológicas en los
currículos de los programas de ingeniería de sistemas.
3.1 Innovación e investigación
Las capacidades de innovación deberán ser
desarrolladas en paralelo con la creación del conocimiento como un eje
fundamental de la generación de conocimiento [21]. Por lo anterior, las capacidades de innovación
deberán presentarse dentro del marco de las Instituciones de Educación Superior
IES que forman ingenieros de sistemas, como un condimento requerido y necesario
para la investigación aplicada, y para reforzar el compromiso adquirido que
tienen las universidades con el estado y las empresas, el cual implica generar
conocimiento de innovación.
Estudios realizados sobre el marco de vinculación
para el fomento de la ciencia, la incubación de formación tecnológica y la
estimulación de la innovación en la relación Universidad, Empresa y Estado (UEE),
basado en los Clusters de
conocimiento; descubre que la triada, ciencia, estado y universidad ha llevado
a las IES a tener mayor claridad sobre su papel y aporte en los diferentes
escenarios que propicien la innovación y sus diferentes frentes de acción [20].
Pese a los apoyos gubernamentales para la
innovación, es necesario contar con el capital humano, estudiantes y docentes
investigadores, que pueda hacerse cargo de materializar toda esta innovación
que permita la generación de conocimiento con base en el desarrollo de las
capacidades de innovación e investigación.
Se tiene infraestructura suficiente para abordar
proyectos de investigación e innovación, pero debido a la baja participación de
docentes y estudiantes en los proyectos de I + D no se obtienen resultados
constantes y suficientes [21]. Las capacidades de innovación de las que habla Henao García, López González, y Garcés Marín [21] son las capacidades de innovación de las
universidades.
No se debe confundir las capacidades de innovación
aplicadas a las personas, con las capacidades de innovación aplicadas a las
empresas y/o universidades. Serrano
García y Robledo Velásquez presenta una serie de variables enfocadas a evaluar
capacidades de innovación en las organizaciones, mediante un diagrama de
afinidad. En éste, éstas variables
se encuentran agrupadas en lo que se ha denominado 5 capacidades: Capacidad de
I + D, Capacidad de Producción, Capacidad de Planeación, Capacidad de
relacionamiento organizacional, Capacidad de aprendizaje organizacional. No obstante, pueden interpretarse
adaptadas a la universidad tomada ésta como una empresa con procesos [22].
Sin embargo, tanto la postura de [21] como la de [22], se toman como parte de la capacidad
investigativa que poseen las universidades y cómo éstas se apoyan en el capital
humano requerido para las investigaciones. Este capital humano, (traducido en
parte en estudiantes, docentes e investigadores) son quienes finalmente deben
desarrollar las capacidades de innovación desde el desarrollo humano.
3.2 Capacidades de innovación y
desarrollo humano
El enfoque en capacidades de innovación desde el
desarrollo que propone esta reflexión adopta la propuesta de Nussbaum , y construye un concepto para esta
necesidad especial en los ingenieros de sistemas.
Infiriendo que el ingeniero de sistemas tiene su
objeto de estudio en la estructura de las ciencias de la computación, las
capacidades innovadoras se presentan como la acumulación constante de
capacidades, es decir, tener la libertad de ocuparse en tomar las oportunidades
que presentan las Ciencias de la Computación, y desde su capacidad de ser y
hacer mejorar su funcionamiento, inventar nuevos elementos que se adicionen o evolucionen
los existentes y si es necesario, reinventar su objeto las veces que le sea
conveniente, siempre y cuando esto sea útil a la sociedad y al mundo, todo de
manera cíclica y progresiva.
La Figura 1 ilustra de manera visual este
concepto propuesto. Observándola,
podemos darnos cuenta que las capacidades de innovación le permiten al
estudiante de ingeniería de sistemas desarrollar la libertad de tomar las oportunidades
desde su capacidad de ser y hacer para transformar las ciencias de la
computación.
Figura 1
Capacidades de Innovación para el ingeniero de sistemas.
Fuente: elaboración propia.
Esta
transformación, no es lineal, podrían determinarse reenfoques que cambien
completamente un tema o un producto y es justo esta libertad la que permite
llegar a la innovación tecnológica, pues cada una de las estrellas, representa
la oportunidad que cada ingeniero pueda tomar, la que elija, será porque es la
que le permite desarrollar lo que él puede ser o puede hacer.
En todo caso, las capacidades de innovación se hacen
ideales se enfoquen en desarrollar las Ciencias de la Computación, como base de
la generación de tendencias tecnológicas nuevas y mejores sobrepasando su
libertad, su creatividad, volviendo a las raíces de estas ciencias para poder
generar aporte en innovación y refrescar su estructura.
Tal y como lo hizo un Babbage con su máquina analítica
o un Atanasoff con su computador digital, se requiere que el ingeniero de
sistemas sobrepase sus libertades y tome las oportunidades. Si estos personajes históricos no
hubiesen tenido la capacidad de innovación para sobrepasar sus libertades y sus
propias oportunidades hoy en día no existiría la computación.
En este sentido, la carencia de capacidades de
innovación desarrolladas desde el currículo tal y como nos muestra el enfoque
de Nussbaum, podría estar llevando al ingeniero de sistemas a desdibujar su
función principal: “Ingeniar”.
Se presume, entonces, conveniente que las propuestas
curriculares vinculen un enfoque en capacidades alineadas con las tendencias
tecnológicas desde la perspectiva no sólo local, si no global enfocando también
el beneficio y desarrollo de las sociedades [11].
3.3 Enfoque de currículo para las
capacidades Innovadoras
En el
contexto de las capacidades innovadoras, se pueden tomar elementos de varios
modelos curriculares, que promuevan un enfoque que lleva al desarrollo de estas
capacidades como apalancadoras del propio sentido científico – tecnológico de
las ciencias de la computación, mediante herramientas de capital humano,
técnico y social.
Entonces, se considera que un enfoque en una propuesta
curricular para el desarrollo de capacidades de innovación en los estudiantes
de ingeniería de sistemas puede estar compuesto por mínimo los siguientes
elementos de aprendizaje:
Cognitivo
+ Tecnológico + Capacidades de Innovación + Desarrollo Social + Investigación
Como se observa en la propuesta anterior, el enfoque
curricular que se busca contiene el elemento cognitivo, como reconocimiento de
la importancia que tiene el aprendizaje de conceptos particulares en la
ingeniería. El siguiente componente es el tecnológico, éste asociado a la
constante validación de lo vigente y la tendencia.
Acto seguido, encontramos el
elemento relacionado con el desarrollo social, él muestra los retos de la universidad
actual en congruencia con el desarrollo humano integral y el desarrollo de las
capacidades hacia el aprendizaje innovador; conecta este desarrollo de
capacidades también con el desarrollo de sociedades, con la importante
responsabilidad de la universidad en este ámbito, mirado desde las propuestas
curriculares, en suma, una
educación que podemos calificarla como “generadora” donde se promueva la
expansión de capacidades y el fortalecimiento del desarrollo humano, debe
propiciar entornos sugestivos que promuevan el aprendizaje innovador y la
capacidad autónoma del estudiante, que se preocupa a su vez por la problemática
de su medio social. Esto implica revisar, de acuerdo al contexto donde se
desarrolla, su diseño curricular, la metodología, y la evaluación de los
aprendizajes, que son momentos concretos de interacción con el estudiante en el
salón de clases [13].
Finalmente se encuentra la
investigación, como un medio a través del cual se podrán materializar las
intenciones de los otros elementos.
La anterior propuesta procura enfatizar en la idea de
que los currículos de Ingeniería de Sistemas son altamente sensibles a los
cambios, adicionalmente, las empresas al irse adaptando al ambiente tecnológico
han empezado a demandar perfiles de ingenieros con conocimientos que se ajusten
a estas necesidades.
Los empresarios crean proyectos para invertir en el
mejoramiento de sus negocios y éstos se dedican a desarrollar muchas
iniciativas de software y hardware diferentes, se hace necesario tener
ingenieros de sistemas con capacidades e innovación para desarrollarlas.
Sin embargo, los egresados de las ingenierías no
pueden tener todos los conocimientos técnicos requeridos, un plan de estudios
no puede contener todos los perfiles profesionales que actualmente el mercado
demanda, por lo cual se debe complementar con estudios de posgrado que perfilen
mejor al ingeniero de sistemas, dirigiéndolo a temas específicos para un mejor
desempeño laboral [23].
En este sentido, se hace necesario realizar un
análisis de tendencias que permita brindar elementos para actualizar los
currículos de formación profesional que se ofertan en el mercado educativo en
el área de Ingeniería de Sistemas para que estos finalmente también se adapten
a las necesidades de los empresarios.
Según [24], se presentan una serie de categorías marco
de temáticas sobre las cuales se deben orientar los procesos de formación de
los ingenieros de sistemas, identificando también una especie de perfiles
demandados, entre estos se encuentran los siguientes conocimientos específicos:
Business Process Outsourcing & Offshoring -
BPO&O (subcontratación de procesos de negocio), adopción de estándares de
calidad como ISO 27000 (seguridad de la información), buenas prácticas
relacionadas con la gestión de las tecnologías: ITIL (marco de referencia
servicios de tecnología), PMI (gerencia de proyectos), CMMI (modelos de madurez
para desarrollo de software), COBIT (objetivos de control para TI), COSO
(Control Interno), TOGAF (arquitectura de TI), SOA (arquitectura de TI
orientada a servicios), investigación aplicada, gestión tecnológica, seguridad
informática, inteligencia de negocios, gestión y aseguramiento de la calidad
del software, ingeniería de requisitos, dinámica de sistemas, diseño y gestión
de proyectos de integración de TIC, administración de la configuración entre
otros.
Entre las competencias genéricas e interpersonales
esperadas por los empresarios, el ingeniero debería desarrollar trabajo en
equipo, calidades humanas, que le permitan entablar relaciones asertivas con
los demás miembros de los equipos de trabajo; cultura ciudadana, aspectos que
conlleven a realizar una lectura acertada de su entorno, interpretar su
realidad y poder construir soluciones que mejoren su realidad, incrementando
los niveles de calidad de vida de la sociedad [24].
Otro de los aspectos que deben tenerse en cuenta en el
desarrollo de los currículos de ingeniería de sistemas son los directamente
relacionados con la estructura de las Ciencias de la Computación. Entre los aspectos
relacionados con esto, se encuentra que para el ingeniero es importante el
emprendimiento, creatividad e innovación [24]. Y es que de manera reiterada está
declarado que las Ciencias de la Computación requieren ser renovadas a la luz
las tendencias tecnológicas, hecho que debe influir
directamente en los currículos “por este motivo, la investigación periódica de
las tendencias actuales permite redefinir las características que debe tener un profesional en el área” [25].
Se hace inevitable que las universidades deban
incorporar mecanismos de preparación y actualización en dichas tendencias, pues
es una responsabilidad inherente a las instituciones educativas y el objetivo
ético en la formación de sociedades, posiblemente algunas universidades sean más
rigurosas que otras, pero aquella que en definitiva no tuviese ninguna lectura
de estos cambios tecnológicos no formará profesionales capaces de enfrentar el
mercado global.
Entre los referentes de tendencias tecnológicas se
encuentra la “Curricula” generada por ACM (Association for Computing Machinery) y la IEEE (Computer Society) , este documento, categoriza actualmente la
disciplina de la computación en cinco subdisciplinas: Ciencias de la
Computación (Computer Science), Ingeniería de la Computación (Computer
Engineering), Sistemas de Información (Information System), Ingeniería de tecnología
e información (Information Technology) e
Ingeniería de Software (Software Engineering). El documento “Curricula”
se encarga de definir y enmarcar el alcance y tópicos de los currículos para
los ingenieros de sistemas, define su objeto de estudio en una serie de
conceptos de las diferentes temáticas comprendidas para la profesión [6].
Otros referentes consultados por las universidades a
nivel curricular es el CDIO: Iniciativa internacional para reformar la
educación en ingeniería [26], liderada por el Massachusetts Institute of
Technology en Cambridge, Estados Unidos.
Este marco, también tiene componentes similares a la Curricula
a su propuesta de teoría vs. laboratorios de práctica. Sin embargo, [26] no menciona en
particular nada sobre capacidades de innovación, solo se refiere a la
recomendación que les da a los profesores de ingeniería sobre los métodos de
estudio innovadores.
La reflexión realizada nos lleva a concluir que las
capacidades de propuestas por Nussbaum
desde lo que se es capaz de ser y hacer, pueden verse desde la
perspectiva del ingeniero de sistemas como esa capacidad de tomar las
oportunidades de las Ciencias de la Computación y transformarlas en beneficio
también de la sociedad; esto da cuenta de la gran responsabilidad que tienen
las universidades de incluir en sus currículos algunas propuestas como el enfoque
que se presenta (cognitivo + tecnológico +
capacidades de innovación +
desarrollo social + investigación) y procurar llevar a cabo su desarrollo
también mediante mecanismos de investigación.
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